El cocinero más famoso del mundo

Es difícil saber quién es la chica más guapa del mundo o cual es la mejor profesión. De hecho, no se puede saber, pues "para gustos, los colores". Por esta regla, tampoco podemos saber quién es el mejor cocinero del mundo. Para algunos, tal vez sea un prestigioso chef italiano; para otros, su abuela. De todas formas, vamos a dar reconocimiento a un hombre que ha cautivado los paladares más exquisitos y ha conseguido posicionarse durante varios años el primero en la lista de los más reconocidos cocineros del mundo: Ferran Adrià.




Nacido en Hospitalet de Llobregat, este cocinero catalán cuenta con 51 años y más de 30 de experiencia culinaria. Empezó fregando platos en un hotel de playa de Castelldefels y hoy en día es conocido mundialmente por sus distinguidos platos.

Fue tras acabar la mili cuando Adrià pisó por primera vez el restaurante que le llevaría a la fama: El Bulli. Junto a su socio, Christian Lutaud, fue incrementando sus conocimientos sobre cocina visitando otros restaurantes, asistiendo a conferencias de importantes chefs y ,de esta forma, cogiendo ideas. Pero cuando su socio se embarcó en otro proyecto, Adrià tuvo que desarrollar su creatividad en solitario y dar a los nuevos platos su estilo. Este aislamiento fue el detonador de su fama mundial.




Su restaurante, El Bulli, es también considerado uno de los mejores del mundo. El restaurante fue creado en 1962 por el matrimonio alemán Hans y Marketta Schilling. En principio era un bar al que acudían los veraneantes. Su nombre es concebido en honor a los perros bulldog del matrimonio. A lo largo de los años pasan diferentes cocinceros y en 1984 Ferran Adrià cruza por primera vez su majestuosa puerta.

Cerró en julio de 2011 para reconvertirse en "El Bulli Foundation", una fundación, sin ánimo de lucro, que pretende innovar en la ciencia gastronómica. Está previsto reabrir sus puertas en 2014.

Es famosa la creatividad de Ferran Adrià, que ahora mismo se ocupa de establecer una estrecha relación entre la comida y la química. Sus exquisitos y novedosos platos no siempre cuentan con materias primas de elevado coste. Para él, todos los alimentos tienen el mismo valor.


Esperemos que sus innovaciones en la cocina nunca dejen de trasladar a otra dimensión a sus clientes vía paladar.

¿Apetecen unos pinchos caseros de Ferran Adrià?